El 89% de los nuevos emprendedores consideran que España no fomenta la creación de empresas

Desde que empezó la crisis, en 2007, la tasa de empleo en nuestro país se ha desplomado un 11%, lo que significa que en ese periodo se ha destruido más de tres millones de puestos de trabajo. En un informe elaborado por el Fondo Monetario Internacional y titulado “Empleos y crecimiento: impulsando la recuperación económica” el FMI detalla que, entre los años 2008 y 2011 España destruyó empleo por encima de sus posibilidades.

¿Qué motivó este comportamiento? Tras analizar los resultados, el organismo sentencia lo siguiente: al menos la mitad de los puestos de trabajo perdidos desde el año 2008 no son consecuencia de la crisis. Todo responde, dicen, a numerosos desequilibrios y desajustes acumulados durante el boom económico.

Ante este escenario, la sociedad española vive en un clima de desconfianza entorno al trabajo. La falta de oportunidades en el mercado laboral o buscar una solución ante un problema económico es lo que ha motivado a muchas personas a poner en marcha su propio negocio, a convertirse en emprendedores.

Por tercer año consecutivo, la Fundación Iniciador y Sage han elaborado el estudio “Observatorio de Clima Emprendedor 2013”. De él se sustraen numerosas conclusiones, la mayoría de ellas en la misma línea en la línea de las anteriormente sacadas por el FMI.

La primera de ellas es que para la mayoría de los emprendedores, el 89% para ser más exactos, España es un país que no fomenta la creación de empresas y encuentran como principal obstáculo la falta de financiación. De hecho, la familia continúa siendo el principal punto de apoyo a la hora de emprender un negocio, seguido de los ahorros personales o en menor medida recurriendo a los business angels, los inversores privadors… Sólo el 7% ha hecho uso del plan ICO.

A estas trabas se suman las cargas fiscales e impuestos que, tanto para autónomos como para PYMES suponen un gran esfuerzo y dificultan el mantenimiento del negocio. En este sentido, reclaman más ayuda de los organismos públicos; principalmente del Estado pero también de otros como los Ayuntamientos o las Administraciones Autonómicas.

En nuestro país existe la Ley de Emprendedores, aprobada recientemente por el Gobierno Central  precisamente para ayudar a este colectivo. Sin embargo, según el estudio sólo el 40% de ellos sabe de su existencia y, dentro los que sí lo saben, el 60% no creen que sea de ayuda.

A pesar de estos obstáculos, emprender sigue siendo una buena opción frente a la falta de oportunidades externas. Tanto es así, que el 70 por ciento del empleo que se genera actualmente en España viene de la mano de autónomos y PYMES.

El 30 por ciento de ellos, sí que creen que la situación de crisis que vive España presenta una oportunidad para crear una empresa. Más de la mitad de los emprendedores están de acuerdo con que el autoempleo es una salida para los jóvenes menores de 30 años que buscan trabajo.